¿Qué son los martillos galponeros y para qué se usan?
El martillo es una herramienta para golpear, que está compuesto básicamente por un cabezal hecho de hierro y un mango que tradicionalmente fue de madera pero que actualmente está siendo reemplazado por material plástico de alta resistencia. Como ya sabemos, el martillo sirve para golpear objetos que se quiere romper, ó doblar por golpe, ó como en este caso específico, para clavar clavos en vigas de madera. Los martillos galponeros en particular, tienen 2 uñas en forma de ”V” detrás de la punta percutora, que permiten sacar los clavos mal clavados, sujetándolos por debajo de su cabeza chata, para extraerlos fácilmente gracias a la forma curva de estas uñas. Esta forma en “V” también se usa para sostener los clavos largos de forma tal que el operario pueda acceder a lugares altos introduciendo los clavos hacia arriba por medio del martillo, para que una vez que están apenas insertados en la madera, se puedan terminar de clavar en forma normal y usando sólo una mano.
Características y principio de funcionamiento
En los martillos, como la parte que golpea al objeto es la cabeza de hierro, el operario trata de dar inercia al martillo y más energía al golpe levantándolo y haciéndolo caer con fuerza para que el peso de la cabeza de hierro se potencie y aumente la fuerza de impacto, ya que el martillo no clavará por el peso del hierro sino por la aceleración que se le imprima haciendo que su energía se multiplique en el momento de caer y golpear.
Tipos de martillos galponeros
Aunque el martillo galponero ya es de por si un tipo especial dentro de los martillos que existen, sin embargo se fabrican con mango de madera de nogal, con mango de fibra plástica ultra resistente ó son hechos de una sola pieza de forja ó fundición los que obviamente tienen bastante más peso.
Los Martillos Papagayo y Loro
Una de las marcas más conocidas de martillos galponeros es la marca “Papagayo” que nació de la fusión de la empresa norteamericana True Temper con la mexicana Herramientas Nacionales y con esta marca fueron conocidos en toda Latinoamérica.
En los años 60s surgió una fábrica argentina de martillos que para usar la recordación de aquella marca, bautizó a sus martillos con el nombre de “Loro” ya que la curvatura de las uñas del martillo se asemeja al pico de aquel animal.
Hoy en día, Stanley fabrica toda la línea de martillos completa.
Mantenimiento
El único cuidado que requieren los martillos es mantener sus mangos limpios para asegurar el agarre y la adherencia de la mano al utilizarlos.
Informe técnico realizado por Crimaral