1. Las Partes que Componen un Pincel
Detallamos a continuación, las partes del pincel y que tenemos que tener en cuenta para hacer una buena compra:
Mango del Pincel o Brocha
Es el elemento de agarre con la mano, un mango bien diseñado, permite que la mano y el pincel sean casi como una única pieza, lo que permitirá que la tarea sea más sencilla, logrando mejor precisión y mejor trabajo.
Las tareas de pintura suelen ser agotadoras,por eso, es fundamental trabajar de manera cómoda.
Los mangos, pueden ser de de madera o de plástico.
En el caso particular de los de madera, se recomienda verificar que sean de buena calidad para qué no se arqueen.
Algunos pinceles tienen incorporado un orificio o agujero, lo cual es muy útil para transportarlo, colgarlo, y para secar el pincel.
Virola o casquillo del Pincel o Brocha
La virola del pincel es una pieza fundamental, ya que su función es mantener las cerdas unidas al mango. Pueden ser de chapa, cobre, goma o de acero inoxidable. Estas últimas son las recomendadas, ya que éste material resiste la oxidación y la corrosión.
Al elegir el pincel, es fundamental la medida, algunos modelos incorporan en la virola la medida del pincel. De esa manera, es más fácil mantener el orden en el trabajo.
Cerdas o pelo del Pincel o Brocha
Este es un tema fundamental para tener en cuenta. Las cerdas o pelos deben ser de excelente calidad.
Busca cerdas densas y haz una pequeña prueba doblando las cerdas cerca de su base, si es de calidad, recuperará su forma original.
Si las cerdas no son de buena calidad, se corre el riesgo de que no cumplan con su función.
Pueden ser naturales, mixtas o sintéticas.
Pinceles o brochas de cerdas naturales.
Son más resistentes y se usan para productos con disolvente, barnices y pinturas alquídicas ya que la cerda se desprende menos del pincel.
Podemos identificarlas por el color oscuro o negro de las cerdas.
Este tipo de material no se recomienda para pinturas a base de agua, ya que las cerdas absorben el agua y pierden su forma. Tampoco para superficies rugosas porque las cerdas se dañan.
Pinceles o brochas de cerdas sintéticas
Por lo general son de color blanco y están hechas de nylon, poliéster o ambos materiales.
Son más económicas y funcionan bien con pinturas al agua y en base aceite. Tienen buena flexibilidad y son fáciles de limpiar.
Suelen ser las preferidas por pintores profesionales ya que si se cuidan apropiadamente, duran muchos años
¿Cómo elegir un pincel de cerdas sintéticas?
Hay que fijarse en las cerdas: si tienen longitudes diferentes y las puntas abiertas aportarán mayor calidad en los acabados.
2. El Tamaño de la brocha:
Las brochas gruesas retienen más pintura para cubrir más superficie antes de volver a coger más pintura, mientras que las brochas más finas son más ligeras y ofrecen un mayor control, por lo que tendremos que presionar el pincel con la superficie que estamos pintando.
Lo ideal es elegir una brocha que sea lo suficientemente ancha como para cubrir de manera eficiente la superficie, pero lo suficientemente estrecha como para controlar la aplicación de pintura. Si estamos pintando un área pequeña, una brocha o pincel ancho no funcionará bien ya que tendrá poco control en la aplicación en zonas pequeñas. Pero si estamos pintando puertas, sería recomendable utilizar una brocha de 1 pulgada.
Las áreas grandes y planas, como las paredes y los techos funcionan mejor con una brocha de 5 pulgadas para que pueda cubrir la superficie más rápido.
3. La Forma del Pincel o Brocha:
Los cepillos en ángulo funcionan bien para cortes a lo largo de bordes y obtener líneas rectas.
Una brocha o pincel delgado en ángulo es ideal para cuando se necesita una línea especialmente fina, mientras que una más gruesa contiene más pintura y funciona bien a lo largo de los techos.
Si estamos pintando una superficie grande y plana, necesitaremos un cepillo plano para que pueda realizar el trabajo de manera rápida y sencilla.
Recomendaciones:
A continuación, te pasamos algunas cosas que debemos tener en cuenta para la mayor vida útil de nuestro pincel:
- Si se utilizan pinturas de tipo látex, lavarlo con agua tibia enjabonada inmediatamente al terminar el trabajo.
- Para pinturas a base de aceite, limpiaer el pincel primero con solvente o thinner y después lavarlo con agua tibia enjabonada inmediatamente después de su uso.
- No dejar el pincel en remojo por largos períodos de tiempo.
- Para mejores resultados y mayor vida útil del pincel, peine las cerdas cuando éstas estén secas.
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